Marc Coma, cinco veces ganador en Motos, vivió su estreno como director deportivo y admitió que la actual edición de la competición “no fue fácil”.
“Alguien podría caer en la equivocación de decir que fue un Dakar fácil, pero no fue así. El 64 % de los participantes llegó al final, mientras que en 2013, cuando se largó desde Perú y terminó en Chile, el porcentaje fue del 67 %. La estadística demuestra que fue un Dakar duro”, señaló el español.
“Fue un Dakar muy interesante. En Autos estuvieron peleando adelante tres marcas distintas. En Motos la lucha fue muy interesante con Toby Price dominando en su segunda participación y el segundo lugar de Stefan Svitko, que es un piloto privado. En Camiones se terminó el reinado de los Kamaz, y en Cuatriciclos, tener a dos hermanos en lo más alto del podio no es algo habitual. En general este Dakar contó con una nueva generación de pilotos que le trajeron mucha emoción a todas las categorías”, analizó Coma.
El clima jugó un papel protagónico en este Dakar. “La primera semana fue muy complicada por la lluvia y en la segunda por el calor. Pero con la experiencia de todo el equipo de trabajo de ASO hemos podido mantener todo el evento en un target de calidad muy alto”, rescató.
El paso de competidor a director deportivo fue un cambio brusco para el español. “Fue un año muy intenso. Mi vida cambió completamente. En el mes de junio estaba compitiendo y al día siguiente estaba en la organización del Dakar. Para mí es todo un orgullo la oportunidad que me han dado. Intentaré aportar toda esta experiencia, todos estos años de carrera”, se puso como objetivo el ex campeón, que ahora mira todo con otro prisma.
“Siempre intuí que tenía una gran magnitud, ahora pude confirmar esa opinión. Quiero continuar en el lado de la organización y de aportar toda mi experiencia. Y conseguir que el Dakar continúe siendo la carrera más grande del mundo, la más dura”, cerró.